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| Foto FEVA |
En el cierre del Premundial de San Juan, Las Panteras superaron 3-0 a Perú y consiguieron la clasificación a una copa del mundo tras 12 años. El partido contó con un insólito final en el que el técnico de las visitantes decidió retirar a su equipo por estar en desacuerdo con los fallos arbitrales. Lucía Fresco fue la máxima anotadora argentina con 16 puntos. Esta será la quinta participación del conjunto nacional en un mundial femenino de voley.
Argentina mostró superioridad de arranque y con solidez logró ventajas de 11-7 en el primer set. Gracias a la inteligencia y variedad en el juego de la armadora Castiglione, Las Panteras fueron contundentes en ataque para vulnerar una respetable defensa peruana. Así Argentina se fue 16-10 al segundo tiempo técnico y luego puedo cerrar ese capítulo inicial por 25-20 con los aportes de Fresco y la capitana Nizetich.
El segundo set tuvo un comienzo similar al arranque del partido, ya que Argentina continuó concentrada y Perú se mostró algo nervioso por momentos, lo que lo llevó a cometer errores. Si bien el encuentro tuvo pocos puntos de bloqueo, Las Panteras cumplieron en este rubro en momentos clave del juego. Allí se destacó la central Busquets. Argentina mantuvo la fortaleza del set anterior para ganar este parcial por 25-19 y lograr así la clasificación al Mundial, lo que desató el festejo del público y del plantel ya que la selección volverá a una Copa del Mundo tras doce años.
Con el objetivo cumplido, el tercer set fue parejo en su primera parte, pero cuando el marcador era de 13-9 en favor de Argentina tras un punto de Castiglione, sucedió algo llamativo: el técnico de Perú, el coreano Sung Jin Hong, decidió retirar a su equipo por estar disconforme con las decisiones arbitrales. De esta manera, y de acuerdo al reglamento, el partido concluyó 3 a 0 a favor de Argentina. Ese extraño hecho no empañó la fiesta de Las Panteras que lograron de este modo el objetivo planteado desde el comienzo del ciclo del entrenador Orduna: que el voley nacional sea mundialista por quinta vez (las participaciones anteriores fueron en 1960, 1982, 1990 y 2002)
El equipo argentino decora así un gran año que contó con una convincente actuación en el Grand Prix, seguido de un muy meritorio segundo puesto en el Sudamericano, para llegar a esta clasificación mundialista con mucha contundencia. El voley femenino argentino pasa por un interesante momento de la mano de una generación muy unida y responsable que está para seguir creciendo día a día.
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